Penas de prisión para 4 Mossos por agresión a un joven en El Raval

Penas de prisión para 4 Mossos por agresión a un joven en El Raval durante el toque de queda

La Audiencia de Barcelona ha condenado a penas de hasta 7 años de prisión y 12 años de inhabilitación a cuatro agentes de los Mossos d’esquadra por la detención de un ciudadano en el barrio del Raval durante el toque de queda de noviembre de 2020. Los cuatro agentes del ARRO han sido juzgados por detención ilegal, lesiones, falsedad documental y delito contra la integridad moral.

Deberán indemnizar a la víctima con al menos 14.466 euros. Los agentes se enfrentaban a penas de entre ocho y 15 años de cárcel y a 22 de inhabilitación.

Los magistrados imponen a tres de los acusados ​​un año de cárcel con una inhabilitación de dos años y medio por el delito contra la integridad moral. A un cabo y otro Mosso, tres años de prisión y ocho de inhabilitación a cada uno por un delito de detención ilegal; tres años de cárcel, 1.080 euros de multa y dos años de inhabilitación por falsedad documental; y 1.080 euros de multa por lesiones. A un tercer agente le imponen tres años de prisión por falsedad documental y, al cuarto, un año de cárcel por delito contra la integridad.

La víctima se encontraba con amigos cuando uno de los agentes acusados ​​le dio el alto con el argumento de que estaban en la calle durante el toque de queda vigente. Unos minutos antes, a uno de sus amigos le habían quitado cinco euros al querer comprar una bebida, y el afectado recriminó a uno de los agentes que persiguiera a la persona que le había quitado en lugar de pararles para identificarlos.

En respuesta, el cabo le agredió, lo arrojó al suelo y le inmovilizó. Cuando el afectado llamó para pedir ayuda, fija la sentencia, otros agentes se añadieron a la agresión, manteniendo la inmovilización y en ningún caso impidiendo esta actuación injustificada. En esos momentos, mientras era inmovilizado en el suelo, los agentes le vejaron y le dijeron al oído frases como “eres basura. eres una mierda”.

Los hechos le provocaron varias lesiones físicas, como la rotura de dos piezas dentales y hematomas, así como un cuadro de sintomatología postraumática que le requirió terapia semanal en los dos meses siguientes.

Además, el afectado fue detenido bajo la falsa acusación de haber dado una patada al cabo, lo que no sucedió, tal y como muestra el vídeo del momento. En concreto, los agentes redactaron en la minuta policial que “había un grupo de tres personas sudamericanas, alteradas, agresivas, abucheando a los agentes y desobedeciendo sus indicaciones”.

La sentencia asegura que “el uso de la fuerza fue innecesario, excesivo y desproporcionado” y que no existía “ninguna necesidad de realización de estas acciones que atentaron contra la integridad moral” del joven, “que no podía esperar que la policía, garante del cumplimiento de sus derechos y de su seguridad, actuara de este modo”. Asimismo, considera probado que el joven fue detenido sin haber cometido ningún delito.