Barcelona se moviliza por la memoria de la DANA y exige responsabilidades a Mazón
Centenares de personas se han concentrado frente a la sede del Partido Popular en Barcelona, ubicada en la calle del Comte d’Urgell, para reclamar la dimisión del presidente de la Generalitat Valenciana, Carlos Mazón. La manifestación, que comenzó a las siete de la tarde, fue impulsada por colectivos juveniles y movimientos sociales como el Sindicat d’Estudiants dels Països Catalans (SEPC), Arran, la CUP y diversos ateneos y centros sociales de la ciudad.
La convocatoria coincidió con el primer aniversario de la DANA del 29 de octubre de 2024, un temporal que dejó 229 fallecidos y miles de damnificados en la Comunidad Valenciana.
Una protesta cargada de simbolismo y denuncia
Entre los asistentes se escucharon consignas como “¡Mazón, dimisión!” y se vieron pancartas con mensajes del tipo “La tempestad es peligrosa, el capital es mortal”. Los manifestantes afirmaron que la catástrofe “no fue un desastre natural, sino político”, denunciando la negligencia institucional, la falta de previsión y los recortes en servicios públicos que, según los convocantes, agravaron los efectos del temporal.
Una portavoz de la Crida LGBTI expresó que “mientras unos morían ahogados, otros negligían de sobremesa”, añadiendo que “unas manos estaban llenas de barro y otras, manchadas de sangre”.
Movilizaciones en toda la Comunitat Valenciana
La protesta en Barcelona formó parte de una jornada de movilización más amplia, con actos simultáneos en Valencia y Castellón. En la capital valenciana, cientos de personas llenaron la plaza del Ayuntamiento a partir de las seis de la tarde, mientras que en Castellón la concentración comenzó una hora más tarde, en la plaza Mayor.
En paralelo, en el Museo de las Ciencias de Valencia se celebró un funeral de Estado en memoria de las víctimas, al que asistió Carlos Mazón, pese a que varias familias habían solicitado que no lo hiciera.
Un acto de memoria y exigencia de responsabilidades
Los organizadores definieron la jornada como un homenaje a las víctimas y una denuncia pública de lo que consideran una tragedia evitable. “Hoy se cumple un año de una catástrofe que se podía haber evitado. No olvidamos ni perdonamos”, declaró un portavoz de Arran.
Los manifestantes aseguraron que mantendrán las movilizaciones hasta que el president asuma sus responsabilidades políticas e institucionales.


































