El Ayuntamiento denuncia a un policía y a un guardia civil por difundir un Fake xenófobo

El Ayuntamiento denuncia a cuatro personas, entre ellos un guardia civil y un policía, por difundir una Fake xenófoba sobre los marroquíes

El Ayuntamiento de Barcelona ha llevado ante la Fiscalía a cuatro usuarios de Twitter, entre ellos a un un guardia civil y un policía, por difundir una Fake xenófoba sobre el falso empadronamiento en la ciudad de 1.600 ciudadanos marroquíes para recibir ayudas sociales y votar a Ada Colau en las próximas elecciones municipales del 28 de mayo. El consistorio considera la difusión de la noticia falsa como un delito de incitación al odio.

El caso denunciado no es la primera ‘fake news’ xenófoba que llega a la Justicia. El pasado mes de noviembre, un guardia civil aceptó quince meses de cárcel por publicar en Twitter un vídeo falso que atribuía a un menor inmigrante no acompañado la autoría de una agresión en Barcelona que en realidad había sucedido en China.

Según la denuncia de la oficina contra la discriminación, el falso mensaje “representa una incitación al odio, el rencor y la animadversión hacia la comunidad magrebí por razón de su origen, atribuyéndoles de forma directa y masiva la comisión de una estafa que afecta al conjunto de la ciudadanía”.

El mensaje falso denunciado por el consistorio empieza anunciando un “nuevo escándalo de la alcaldesa de Barcelona y su equipo de gobierno”. En realidad es un bulo, no un escándalo, ya que no hay 1.600 marroquíes empadronados en un piso para votar y recibir ayudas.

Continúa el mensaje explicando que “… La Guardia Civil ha entrado en un piso de la zona de Horta-Guinardo porque figuraban 1.600 empadronados de origen magrebí. Al entrar en el piso, la Guardia Civil se encuentra que solo vivían allí cinco individuos; los 1.595 restantes vivían en Marruecos, pero, al estar empadronados en Barcelona, cobraban todas las ayudas y podían votar por correo en las próximas elecciones municipales (…) Si Ada Colau gana las elecciones, ya puedes pensar de dónde han salido los votos”,

El concejal de derechos de Ciudadanía de Barcelona, Marc Serra, enmarca el mensaje falso en “una estrategia de desinformación global y organizada que ha llegado a Barcelona”.

Según la denuncia, esa conexión con el voto a Colau supone un “indudable contenido calumnioso” hacia la alcaldesa. Los tuiteros que difundieron el bulo, agrega el consistorio, “eran conocedores de la absoluta falsedad del mensaje por su total inverosimilitud”, ya que no iba acompañado de ninguna noticia ni referencia periodística que permitiera atribuirle un mínimo de credibilidad.

Los tuiteros que difundieron el bulo “se ampararon en un nocivo y estigmatizando rumor falso, que los magrebíes se empadronan de forma fraudulenta en domicilios para obtener ayudas económicas”, remarca la denuncia.

La difusión de este bulo, argumenta el Ayuntamiento, no pueda quedar amparada bajo la libertad de expresión ya que supone “un menosprecio y una humillación” para la comunidad magrebí e incluye “mensajes discriminatorios y que promueven la violencia” entre el colectivo de personas extranjeras.