Vecinos de Can Baró quieren que se empiecen a hacer actuaciones en la zona

Vecinos de Can Baró quieren que se empiecen a hacer actuaciones en la zona

Can Baró, uno de los 11 barrios de Horta-Guinardó, es uno de los territorios que ha entrado en el Plan de barrios del Ayuntamiento de Barcelona de cara al mandato municipal actual.

Representantes vecinales de la zona, agrupados en la Plataforma Can Baró, están esperanzados con la noticia, pero lo ven como un reconocimiento a sus reivindicaciones y al deterioro de la zona.

Hace tiempo que denuncian que históricamente ha habido poca inversión y advierten que hay poco tejido asociativo y comercial y carencias en el ámbito estructural, urbanístico o de transporte.

Aprovechar el trabajo hecho

Ahora piden al consistorio que saque del cajón los proyectos que ya están hechos en espera de presupuesto y también que se aproveche el trabajo realizado previamente en procesos participativos anteriores para empezar a hacer inversiones y actuaciones en la zona.

Las calles de Can Baró son empinadas, con las aceras estrechas y una urbanización que, en general, tiene poco en cuenta el peatón.

Es uno de los aspectos que denuncian los representantes vecinales de la zona y que esperan resolver ahora con el Plan de barrios.

La mejora de la conexión con el transporte público es otra asignatura pendiente.

También quieren que se favorezca la creación de un tejido asociativo y comercial que, advierten, ahora es prácticamente inexistente.

Nuevos equipamientos

En esta línea, explican que hay proyectos ya hechos en espera de que se dote de presupuesto y que servirían para solucionar algunas de las carencias existentes.

Por ejemplo, el de la reforma de la antigua Escola Pirineu para convertirla en un equipamiento o el de la construcción de un aparcamiento en la calle de Ramiro de Maeztu.

Advierten, además, que ya se ha hecho un proceso participativo conjuntamente con el Ayuntamiento y que ahora es momento de ir al grano.

La urbanización de la calle de Albert Llanas, la última fase de la reforma de la plaza de Raimon Casellas, el tratamiento de los restos de amianto que hay en el Turó de la Rovira y obtener un mayor retorno social del impacto que genera la proximidad con el Parc Güell son otros de los aspectos que esperan solucionar este mandato con la incidencia del Plan de barrios.

Vecinos de Can Baró quieren que se empiecen a hacer actuaciones en la zona