Prisión sin fianza para Dani Alves, acusado de violación a una chica en la discoteca Sutton

Prisión provisional, comunicada y sin fianza para el jugador de fútbol Dani Alves, acusado de haber violado a una chica de 23 años en la discoteca Sutton de Barcelona. Así lo habían solicitado la fiscalía y la acusación particular.

Alves ha entrado en el módulo de ingresos del centro penitenciario Brians 1, en Sant Esteve Sesrovires, este viernes por la tarde. Seguramente pasará todo el fin de semana, antes de que se decida en qué módulo quedará ingresado durante los meses en los que espera el juicio por un delito de agresión sexual.

Por la mañana, el ex jugador del Barça ha declarado ante los Mossos d’Esquadra en la comisaría de Les Corts. Luego lo trasladaron en calidad de detenido, en un coche de la policía y esposado, hasta la Ciudad de la Justicia, donde declaró ante la jueza durante una hora, aproximadamente.

La juez ha tomado la decisión de enviarlo a prisión a media tarde después de escuchar a todas las partes: la víctima, que ha ratificado su denuncia; el acusado y un forense, que ha certificado que el semen que se halló en el lugar de los hechos pertenece a Alves. También tuvo en cuenta las imágenes que grabaron las cámaras de seguridad del local y que muestran la secuencia de los hechos.

Según ha relatado este viernes la víctima ante la jueza, el actual jugador del Pumas de México la agarró por el cuello, la abofeteó y la violó en los lavabos de la zona VIP de la discoteca. Alves salió primero del baño y la dejó allí. Cuando la chica salió y el personal de la discoteca vieron su estado aplicaron los protocolos de agresión sexual.

La jueza ha decidido decretar prisión sin fianza ante las contradicciones en el relato de Alves y al considerar que presenta un elevado riesgo de fuga, dadas sus capacidades económicas y que reside fuera de España.

Brasil, país de origen de Alves, no tiene acuerdo de extradición con España. Los hechos habrían ocurrido en la madrugada del 30 de diciembre en la discoteca Sutton.

La joven avisó al servicio de seguridad del local. La discoteca activó el protocolo, aisló a la víctima y avisó a la policía, que le tomó declaración. A principios de enero, la mujer denunció el caso a los Mossos d’Esquadra.