Nuevo sistema de radares en el interior de Barcelona para reducir la siniestralidad

Nuevo sistema de radares en el interior de Barcelona para reducir la siniestralidad

El Ayuntamiento de Barcelona tiene entre sus prioridades la reducción de la accidentalidad y los siniestros viales en la capital catalana y, en este sentido, trabaja de manera transversal para aplicar políticas y medidas concretas que permitan reducir los siniestros de tráfico en la ciudad. Esta problemática se aborda, por un lado, desde la concienciación y la sensibilización de la ciudadanía, y por otro, con medidas concretas que permitan incidir y disminuir las conductas de riesgo.

En Barcelona uno de los factores que más influyen como causa indirecta sobre los siniestros, y que agravan sus efectos, es el exceso de velocidad. Por este motivo, el Gobierno municipal ha puesto en marcha una estrategia para reducir la velocidad general de la capital catalana, con el objetivo de consolidar Barcelona como una ciudad 30, llegando a finales de año en un 75% de las vías con este límite.

En este contexto, y como un elemento más para garantizar el cumplimiento de los límites en materia de velocidad, este 2021 el Ayuntamiento de Barcelona hace una apuesta por dotarse de un sistema de control automático de los excesos de velocidad a través de una red de radares en el interior de la ciudad.

La medida responde a los objetivos que marca el Plan de Movilidad Urbana (PMU) 2024 y el Plan Local de Seguridad Vial de Barcelona 2019-22. Con este fin, el consistorio instalará radares de tramo, de punto y pedagógicos en ubicaciones específicas de la ciudad que pueden convertirse en un riesgo para la seguridad vial, fijadas a través de un grupo de trabajo conjunto integrado por la dirección de Movilidad y la Guardia Urbana de Barcelona.

Radares de tramo

En el marco de este nuevo sistema de captación de infracciones, el próximo mes de marzo entrará en funcionamiento un nuevo radar de tramo en el Túnel de la Rovira (2 sentidos de circulación), desde la plaza de Alfonso el sabio hasta la rambla del Carmel. Se trata del segundo radar de estas características que se instala en la ciudad. El primero, se colocó en el año 2016 en la Ronda de Dalt (1 sentido de circulación), en el ámbito comprendido entre Karl Marx y el Nudo de la Trinidad.

En paralelo, también se está instalando el radar de tramo del Túnel de Badal (2 sentidos de circulación), entre la plaza Cerdà y la avenida Diagonal, que entrará en funcionamiento este verano y, próximamente, se licitará el de la Ronda Litoral (2 sentidos de circulación), en el tramo comprendido entre la Barceloneta y Miramar, con el objetivo de ponerlo en funcionamiento en 2022.

Los radares clásicos controlan la velocidad en un punto pero el radar de tramo incorpora una tecnología de cámaras y lectura de matrículas que permite calcular la velocidad media a la que ha circulado un vehículo en todo el ámbito que se controla. De esta manera el sistema identifica aquellos vehículos que superan el límite de velocidad de forma continuada. El radar de tramo permite estudiar los movimientos y los flujos circulatorios y obtener datos para posteriores análisis en el ámbito de la movilidad; también evita el efecto frenado-acelerada que a menudo se produce ante la instalación de un punto de control de velocidad fijo. Por otra parte, con esta tecnología el conductor tiene la posibilidad de corregir a lo largo del tramo un exceso de velocidad puntual.

Radares de punto

En paralelo, a finales de este año se iniciará el despliegue de 32 radares de punto en el interior de la ciudad que configurarán el grueso de este nuevo sistema para incrementar la seguridad vial. Esta tecnología se instalará en aquellas vías principales y calles 30 en los que la Guardia Urbana ha detectado un elevado número de infracciones por exceso de velocidad, que aumentan el riesgo de siniestro vial en estos puntos. Las ubicaciones serán las siguientes:

– C / Pau Claris, altura de pl. Urquinaona
– C / Aragón tramo c / Urgell c / Casanovas
– Av. Diagonal, altura de la c / Roger de Flor
– Av. Paralelo, altura de la c / Palaudàries
– Gran Via Corts Catalanes, altura de la c / Química
– Gran Via Corts Catalanes, altura de la c / San Roque / San Germán
– Calle A, altura calle número 2, en el polígono de la Zona Franca
– Av. Diagonal, a partir de pl.Pius XII / Palau Pedralbes
– Túnel de la rda. del General Mitre, a la altura de la desincorporación hacia el C / Can Rabia
– Av. Diagonal, altura c / Numancia
– C / Balmes, altura ronda. General Mitre
– Rda. General Mitre, altura c / Ganduxer
– Pg. Bonanova, altura c / Anglí
– C / Isaac Newton, altura c / Císter
– Av. Jv Foix, altura c / Ramon Miquel y Planas
– Av. Vallvidrera, ámbito de la estación Peu del Funicular de FGC
– C / Anglí, altura c / Hort de la Vila
– Trav. de Arriba, altura c / Verdi
– Av. Estatuto, altura c / Jorge Manrique
– C / Piferrer, altura c / Alella
– Pg. Fabra y Puig, altura c / Canigó
– C / Santander, altura c / Cáñamo
– C / Felipe II, altura c / Murcia
– C / Ferran Junoy, altura c / Sao Paulo
– Av. Meridiana, altura C / San Antonio Maria Claret
– C / Aragón, altura c / Coruña
– Av. Litoral, altura c / Arquitecte Sert
– Gran Vía Corts Catalanes, altura c / Selva de Mar
– Av. Litoral, entre c / Laguna y C / Jaume Vicens Vives
– C / Rocafort, altura c / Sepúlveda
– C / de Santos, altura c / España Industrial
– Pg. Bonanova, altura c / Iradier

Radares en entornos escolares

A parte, y en el marco del desarrollo del programa Protegemos las Escuelas, se implantarán medidas para reducir la velocidad en aquellos entornos escolares donde se actúa este 2021. Las intervenciones incluirán refuerzo de la señalización horizontal y vertical, modificaciones de fases semafóricas, instalaciones de cojines berlineses y aceras pasantes y también la implantación de radares.

De este modo, en los siguientes entornos escolares se instalarán 12 nuevos radares de punto que controlarán que la velocidad máxima en estos ámbitos no supere los 30 km / h.

– C / Numancia (entre c / Anglesola y C / Dios y Mata), escuelas Itaca y Anglesola.
– C / Aragón (entre c / Bruc y ps. De Gracia), escuela Lestonnac y Escolapias Llúria.
– C / Mallorca (entre c / Nápoles y C / Roger de Flor), escuela Dominicas.
– C / Mallorca (entre c / Monte y C / Fontova), escuela Dovella.
– Trav. de Gracia (entre c / Aribau y C / Alfonso XII), escuela Niño Jesús.
– C / Industria (entre c / Sant Quintí y C / Cuenca), escuela Miralletes y instituto Moisés Broggi.
– C / San Antonio María Claret (entre c / Trinxant y C / Guinardó), escuela Antoni Balmanya.
– C / Balmes (entre c / Marià Cubí y trav. De Gracia), Escuelas Pías.
– C / Balmes (entre c / Francolí y C / Santjoanistes), escuela Poeta Foix.
– C / Entença (entre c / Provenza y C / Rosselló), escuelas Xirinacs y Entença.
– C / Cerdeña (entre c / Taxdirt y trav. De Gracia), escuela de las Aguas.
– C / Consejo de Ciento (entre c / Bruc y C / Girona), Centro Educativo López Vicuña.

Radares pedagógicos

También formando parte de este nuevo sistema, se extenderán los radares pedagógicos. La primera prueba piloto de esta tecnología se hizo en 2013 en la avenida Foix, bajo el puente de Reina Elisenda. Desde entonces y hasta hoy se han habilitado hasta un total de 105 ubicaciones en los diez distritos de Barcelona en las que el Gobierno Municipal ha instalado rotatoriamente estos tipos de radares, con el objetivo de conseguir un efecto de alerta sobre los conductores. El hecho de colocar las unidades periódicamente en diferentes lugares ha permitido adaptarse a las necesidades de cada territorio y contribuir a evitar que los conductores se acostumbraran.

De cara a este 2021, el Gobierno municipal tiene previsto sumar 30 ubicaciones más donde se colocarán este tipo de radares de forma rotatoria.

Los radares pedagógicos constan de unos paneles electrónicos que muestran los conductores la velocidad a la que están circulando y al mismo tiempo los alertan si superan los límites de la vía. La particularidad de estos radares es que sólo miden e informan de la velocidad, pero no sancionan. El objetivo de los mismos es concienciar a los conductores de la velocidad a la que están circulando para que la disminuyan al tiempo recoger datos del comportamiento de los vehículos en los puntos elegidos.

En el año 2020 las infracciones por exceso de velocidad en Barcelona prácticamente se doblaron, pasando de las 347.173 a las 604.104 denuncias por este concepto.

Nuevo sistema de radares en el interior de Barcelona para reducir la siniestralidad