Recta final de las obras del Túnel de Glòries

Recta final de las obras del Túnel de Glòries

Ya están ejecutadas más del 85% de las obras de construcción del túnel de carretera que discurre por debajo de la plaza de las Glòries. Los trabajos para hacer realidad esta nueva infraestructura viaria encara ya su recta final con el objetivo de poner en funcionamiento el túnel de salida de la ciudad -sentido Besòs- el mes de septiembre, y el túnel de entrada a la ciudad -sentido Llobregat- entre finales de noviembre y principios de diciembr

Después de que el pasado mes de enero se llevara a cabo la excavación que permitió conectar el túnel a ambos lados de su recorrido (Castillejos-Rambla de Poblenou), tanto en un sentido como en el otro, los trabajos se centran ahora al finalizar los últimos flecos de la obra civil y en seguir trabajando en las instalaciones y los acabados de la infraestructura.

Los trabajos de obra civil que quedan por ejecutar son la instalación de prismas de servicios, el tendido de zahorras y el hormigón del pavimento del túnel, y la finalización de los muros de instalaciones y de las aceras que recorren el interior del túnel.

En cuanto a las instalaciones, actualmente se sigue trabajando en las salas técnicas, las bandejas de instalaciones, las tuberías de la red antiincendios y el cableado. A nivel de acabados del túnel, se está abordando la colocación del falso techo, la instalación de los paneles vitrificados y el pintado del techo y de las salidas de emergencia.

Aunque el paro de dos meses de las obras debido a la irrupción de la pandemia por Covid-19, los trabajos se han adaptado y han reprogramado, adoptando una serie de medidas para garantizar la seguridad y la salud de los trabajadores (compartimentando espacios de trabajo para garantizar distancias, ampliando los equipos de protección individual, etc).

A pesar de la situación excepcional que se está viviendo, el esfuerzo realizado y las modificaciones operativas han permitido mantener las tareas sin repercusiones relevantes en los plazos de evolución de la obra ni en las previsiones de finalización, más allá de la propia parada de los trabajos durante el confinamiento total.

Una obra de gran complejidad

La actuación que se está llevando a cabo en el subsuelo de la Plaza de las Glòries es una de las obras de mayor complejidad técnica que se han realizado en la ciudad. Consiste en la construcción y puesta en funcionamiento de un túnel urbano, que sigue la traza de la Gran Vía -con dos tubos independientes con circulación unidireccional- con una longitud total de 957 metros, (1.157metres, si se incluyen las rampas de acceso), por donde circulará el tráfico de la Gran Vía, una de las principales vías de salida y de acceso a la ciudad, tanto por el vehículo privado como por el transporte público.

El primer tramo de túnel (de una longitud de 508 metros) está situado entre la calle Castillejos y la calle Badajoz. Es el tramo más profundo y transcurre por debajo de los túneles ferroviarios que cruzan las Glòries, llegando a 25 metros por debajo de la rasante de la plaza.

El segundo tramo de túnel (de una longitud de 449 metros) va de la calle Badajoz en la Rambla del Poblenou, en un tramo horizontal que discurre a una profundidad media de unos 10 metros por debajo de la rasante de la Gran Vía.

El túnel se ha construido por debajo de 4 infraestructuras ferroviarias existentes: el túnel de la L1 Metro, el de la R1, el de la R3 / R4 y el de la línea R2 sur de Cercanías. El paso por debajo de estas infraestructuras ha sido especialmente delicado y ha requerido de un gran esfuerzo técnico y de ingeniería.

La excavación se ha llevado a cabo mediante un proceso de ejecución por avances sucesivos, que ha garantizado la mínima deformación de los túneles ferroviarios existentes. De este modo se ha protegido su estabilidad, a la vez que se ha mantenido el servicio ferroviario a los usuarios. También se ha excavado por debajo de varios colectores de la red de alcantarillado y galerías de servicios.

Para construir el túnel se han ejecutado casi 60.000 m2 de muros pantalla, algunos de los cuales, en el centro de la plaza, han llegado a tener hasta 54 metros de profundidad. Asimismo, hay más de 25.000 metros de pilotes de hormigón.

Durante la construcción del túnel se han bombeado diariamente 25.000 m3 de agua freática, el equivalente a 10 piscinas olímpicas. Actualmente el freático está recuperando su nivel habitual y únicamente continúan funcionando 2 bombas de las 42 que han llegado a estar operativas en el momento de máxima extracción.

Hay que recordar que antes del inicio de las obras se colocaron sensores en todos los edificios del ámbito para controlar posibles movimientos y garantizar la seguridad de las obras y las estructuras de su entorno.

Referencia en modernidad, eficiencia y seguridad

El nuevo túnel cumple con las últimas y más restrictivas medidas de seguridad y control de túneles, especialmente en relación a la gestión de incendios y salidas de emergencia (situadas a menos de 200 metros).

El diseño de los equipamientos y de las instalaciones (en el que ha participado el Departamento de Túneles Viales, el Servicio de Prevención y Extinción de Incendios y Salvamento, el Departamento de Movilidad y la Guardia Urbana) dotan al túnel de unos altos niveles de funcionalidad e inteligencia.

El paso de los vehículos contará con un seguimiento permanente las 24 horas desde la central de operaciones de la ciudad, a través de las diferentes cámaras y sensores que se instalarán. En cuanto a los paneles vitrificados que revisten el interior del túnel, son de una calidad singular y no tienen juntas, facilitando así las tareas de limpieza. El túnel contará con iluminación led, tendrá 4 apartaderos de emergencia y un total de 35 ventiladores.

Una obra, dos adjudicaciones

La empresa pública BIMSA adjudicó el 15 de marzo de 2010 la redacción del proyecto constructivo del túnel de Glòries a la UTE Esteyco – Transfer, el cual fue aprobado definitivamente por la Comisión de Vivienda, Urbanismo y Medio Ambiente el 22 de enero de 2015. El 26 de febrero de 2015, BIMSA adjudicó a la UTE Romero Gamero, SAU; Benito Arnó e Hijos, SAU; Copisa Constructora Pirenaica, SA, y Comsa, SA, los trabajos correspondientes a las obras relativas al proyecto ejecutivo de los túneles de carretera en la plaza de las Glòries, entre las calles Badajoz y Castillejos.

En abril de 2017 el Consejo de Administración de BIMSA notificó la rescisión del contrato después de que la auditoría del túnel de Glòries, encargada por el Ayuntamiento de Barcelona, ​​revelara diversas circunstancias que generaron un retraso en las obras y un posible aumento respecto al precio de la adjudicación, aunque se mantuvo dentro del presupuesto global del proyecto.

A partir de aquí, los trabajos se volvieron a adjudicar, dividiéndolos en 5 lotes, y la obra civil del túnel, que se alargaría hasta la Rambla de Poblenou, se reinició en marzo del 2018. El Gobierno municipal introdujo una serie de mejoras en el proceso de licitación con el objetivo de diversificar adjudicatarios e impedir bajas excesivas; evitando el riesgo que supondría que obras de estas dimensiones se concentraran en un único adjudicatario y facilitando la ejecución simultánea de varias actividades a la vez.

La obra de construcción del túnel de las Glòries ha supuesto, a lo largo de todos los años, la generación de empleo y actividad económica de forma directa para 22 empresas contratistas relevantes que, al mismo tiempo, han subcontratado varias empresas necesarias para llevar a cabo trabajos especializados.

A día de hoy, en los trabajos para la construcción del túnel se han invertido más de 1.000.000 de horas de trabajo (1.024.009 horas) y actualmente hay un promedio mensual de 150 personas trabajando en la obra.

Generación de un nuevo espacio

La actuación en este ámbito de la ciudad, iniciada con la deconstrucción de la antigua anillo viario, permitirá soterrar el tráfico rodado y supondrá generar un nuevo espacio para la ciudadanía en superficie, libre de coches, para que los peatones, los vecinos , el verde y los usos alternativos al del vehículo privado sean los protagonistas.

La primera fase del nuevo parque de Glòries abrió a la ciudadanía en abril del 2019. Barcelona incorporó así un nuevo pulmón verde de 20.400m², ocupando parte del espacio destinado anteriormente el tráfico privado.

Este 2021 el desarrollo de este gran ámbito continúa avanzando con la aprobación del plan que desarrolla urbanísticamente el espacio de la plaza de las Glòries situado entre las calles de Castillejos, Badajoz-Independencia, Consejo de Ciento y el parque de la canopia.

El documento ordena los usos de todo este ámbito y sitúa en los equipamientos públicos, las viviendas y el verde. El plan permitirá obtener 2 hectáreas que harán posible ejecutar la zona norte del parque de la canopia, que debe llegar hasta la calle del Consell de Cent.

Asimismo, también se ha hecho la aprobación del proyecto de urbanización «CANopen-Ámbito Tranvía» que incluye la urbanización asociada al recorrido del tranvía en el tramo comprendido entre las calles de Castillejos y Badajoz, a su paso por la plaza de las Glòries.

En este ámbito se urbaniza la avenida Diagonal entre Castillejos y Cartagena (rambla de los Encants); se actúa sobre el lado Llobregat de la rambla de los Encants entre la avenida Diagonal y la calle de Caspe; se incluye un intercambiador de transporte público situado frente a la fachada del Museo del Diseño de Barcelona y se prevé la urbanización asociada a la conexión provisional de los tranvías con las vías actuales de la avenida Diagonal y la Gran Vía de las Cortes Catalanas (banda Besòs del parque).

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