Golpe al narcotráfico en el Port Olímpic
Los Mossos d’Esquadra, desde la comisaría de Sant Martí, llevaron a cabo el sábado un operativo exitoso que culminó con la detención de diez hombres. Estos individuos habían transformado la venta de cocaína y marihuana en la zona turística del Port Olímpic de Barcelona en su forma de vida. Según investigaciones, la red criminal, claramente organizada, no solo ofrecía drogas a turistas, sino que también escaló su nivel de violencia, enfrentándose a otros grupos organizados por el control territorial de la venta ilegal.
La operación, liderada por los agentes de paisano del equipo Fura, permitió desarticular esta estructura que operaba cerca de hoteles y discotecas, incrementando la inseguridad en una de las áreas más concurridas de la ciudad.
Delitos y modus operandi
Los detenidos enfrentan cargos por delitos contra la salud pública y pertenencia a un grupo criminal. La organización se dispersaba estratégicamente en las calles cercanas para captar clientes, principalmente turistas, ofreciendo pequeñas dosis de droga que ocultaban en plantas y muros para evitar su confiscación durante posibles registros policiales.
A través de vigilancias y seguimientos rápidos, los agentes lograron intervenir en el momento exacto en que realizaban transacciones ilegales. Durante el operativo, se incautaron drogas, machetes y otras armas blancas que los traficantes utilizaban para defenderse de grupos rivales. Estas herramientas eran fundamentales en las violentas disputas por el control del mercado de drogas en la zona.
Organización y rivalidad violenta
Los Mossos confirmaron que los implicados, que podrían sumar más de diez, operaban de manera organizada. Se distribuían roles para captar clientes, vender drogas y realizar contravigilancias, identificando la presencia policial y garantizando la continuidad de sus actividades. Además, mantenían una red de vigilancia para controlar otros grupos criminales que intentaban incursionar en su territorio.
Los enfrentamientos entre grupos han sido intensos. En diciembre pasado, un hombre sufrió un apuñalamiento en la zona, hecho vinculado a las batallas por el control del tráfico de drogas. En Badalona, un incendio en un piso se relaciona con estas disputas entre clanes cada vez más violentos, según fuentes policiales.
Impacto y desafíos a futuro
Aunque los detenidos podrían volver a organizarse tras recuperar su libertad, los Mossos d’Esquadra han identificado a los implicados y demostrado su modus operandi. Este golpe significativo a la delincuencia organizada pretende disuadir futuras operaciones ilegales y garantizar mayor seguridad en el Port Olímpic de Barcelona.
El operativo subraya la importancia de la presencia policial y las investigaciones integrales para desmantelar redes criminales que afectan la seguridad pública y el bienestar de las comunidades locales.