Cómo apuntarse a la Lista Robinson
Si estás harto de que te llamen a horas intempestivas para proponerte ofertas de telefonía, o una tarjeta que acabará con tus problemas económicos, lo primero que debes hacer es apuntarte a la Lista Robinson. Te explicamos como hacerlo.
La Lista Robinson es un servicio cuya finalidad es ayudarte a dejar de recibir la publicidad que no deseas. Es gratuito y seguro.
No solo para llamadas
Este registro no es solo para dejar de recibir llamadas de publicidad: quien se apunta puede solicitar también que dejen de mandarle correos físicos o electrónicos o mensajes de texto, por ejemplo.
Cómo apuntarse a la Lista Robinson
1. Debes entrar en la página web de la Lista Robinson: puedes hacerlo directamente desde este botón
APUNTARSE EN LA LISTA ROBINSON
2. Debes registrarte en el servicio, con tus datos y dirección de email. Tendrás tu propia cuenta.
3. Una vez confirmado el registro, podrás elegir cuál es el tipo de comunicaciones que ya no deseas recibir: las opciones son e-mail, teléfono (móvil y fijo), correo postal y mensajes SMS/MMS. Las distintas comunicaciones se activan por separado, indicando tu dirección/número. Por ejemplo, si lo deseas, puedes pedir que dejen de llamarte por teléfono, pero la empresa podría seguir enviándote mensajes de texto o de correo.
El servicio es sencillo, gratuito, pero no inmediato: tienen que pasar 3 meses desde el momento en que te apuntas para que la Lista Robinson empiece a hacer efecto.
¿Qué es la Lista Robinson?
La Lista Robinson es un servicio gratuito de exclusión publicitaria, a disposición de los consumidores, que tiene como objetivo disminuir la publicidad que éstos reciben.
El Servicio de Lista Robinson se enmarca en el ámbito de la publicidad personalizada, es decir, aquella publicidad que recibe un usuario direccionada a su nombre.
Para el progreso de la actividad económica, el tratamiento de datos de carácter personal es vital. En particular, los tratamientos de datos con fines publicitarios se reconocen en el Reglamento (UE) 2016/679.
El fomento del legítimo ejercicio de dichas actividades debe conciliarse necesariamente con el respeto al derecho a la protección de datos de las personas. Por ello resulta necesaria la búsqueda del equilibrio entre el derecho a la protección de datos y el legítimo tratamiento de los mismos.
Esto queda plasmado en la normativa vigente: Ley Orgánica 3/2018, de 5 de diciembre, de Protección de Datos Personales y garantía de los derechos digitales. Su objetivo principal es proteger las libertades públicas de las entidades y los derechos fundamentales de los ciudadanos, estableciendo unas obligaciones para toda entidad que realice tratamientos de datos de carácter personal.
Asimismo, en lo que se refiere a las comunicaciones comerciales realizadas a través de llamadas telefónicas, correo electrónico, SMS o equivalentes, es necesario tener en cuenta lo dispuesto en la Ley 11/2022, de 28 de junio, General de Telecomunicaciones y la Ley 34/2002 de 11 de julio, de Servicios de la Sociedad de la Información y de Comercio Electrónico.