Barcelona impulsa nuevas medidas para reducir el ruido nocturno en varios puntos de la ciudad

Barcelona impulsa nuevas medidas para reducir el ruido nocturno en varios puntos de la ciudad

El ruido es el segundo factor ambiental que más impacta en la salud de la población, justo por detrás de la contaminación del aire. En el caso de Barcelona, ​​según las estimaciones hechas por la Agencia de Salud Pública de Barcelona (ASPB), más de 210.000 personas sufren una molestia intensa (afectación emocional, psicológica y social severa) y más de 60.000 personas sufren un trastorno grave del sueño debido a la exposición continuada al ruido de tráfico.

En los casos más graves, el ruido puede incidir también en la aparición y agravamiento de enfermedades cardiovasculares y metabólicas. En este sentido, la ASPB calcula que el ruido de tráfico es el responsable de unos 300 casos nuevos de cardiopatía isquémica del corazón y del 3% de las muertes por esta causa cada año, lo que se traduce en 30 muertes anuales en Barcelona.

Más allá de estas cifras, los datos de la Encuesta de Salud de Barcelona 2021 hecha por
la ASPB apuntan igualmente que el 55% de la ciudadanía de Barcelona considera que su barrio tiene mucho ruido y el 18% declara tener una molestia intensa durante la noche debida al ruido del ocio en el interior de su domicilio.

Adicionalmente, el 15% de las personas adultas de la ciudad aseguran que se despiertan más de una noche a la semana por culpa del ruido. Las prevalencias varían de forma notable según el distrito, siendo Ciutat Vella, Sants-Montjuïc y el Eixample los tres distritos que presentan peores indicadores en el estudio.

Principales fuentes de ruido de la ciudad

El tráfico es la fuente de ruido que impacta la práctica totalidad de la superficie de la ciudad y la fuente más relevante de día y de noche. Más de la mitad de la población se expone a un ruido de tráfico igual o superior a lo que la Organización Mundial de la Salud (OMS) considera perjudicial para la salud tanto durante todo el día (53 dB) como por la noche (45 dB).

El impacto de los grandes ejes ferroviarios de la ciudad se ha reducido: casi la práctica totalidad de las vías ferroviarias en zonas residenciales están cubiertas. El uso industrial es cada vez más de baja intensidad y por tanto su impacto se reduce (en Sant Martí casi ha desaparecido y ha bajado en el resto, incluso en la Zona Franca). La contribución a los niveles globales de las calles peatonales se centra en horario diurno y de tarde y tiene relevancia sobre todo en zonas sin tráfico (por ejemplo, Ciutat Vella).

Por la noche, el tráfico sigue siendo la fuente de ruido con mayor impacto, pero en algunas zonas de la ciudad aparece otra fuente de ruido vinculada al uso intensivo del espacio público. Según la percepción ciudadana ésta es una de las fuentes que más molestias generan. En espacios de pública concurrencia, la calidad acústica de noche puede ser peor que la de día.

Zonas Tensionadas Acústicamente en Horario Nocturno

Por esta situación de uso intensivo del espacio público durante el horario nocturno, se crean las Zonas Tensionadas Acústicamente en Horario Nocturno, un nuevo instrumento a disposición de los distritos por para encontrar planes de reducción de contaminación acústica adaptadas a cada caso.

A partir de las informaciones disponibles de los distritos y vecinos y vecinas las primeras zonas que se estudiarán son:

  • Calle de Enric Granados
  • Plaza de George Orwell
  • Calle de Joaquim Costa
  • Calle de Almirante Churruca
  • Rambla del Poblenou
  • Calle Rogent
  • Calle de la Allada Vermell
  •  Calle Nou de la Rambla
  • Plaza de Osca
  • Triangle Lúdic
  • Algunas plazas de la Vila de Gràcia

El Plenario deberá dar conformidad este mes de mayo a este nuevo instrumento para
analizar si estas zonas superan en 3 decibelios los límites permitidos de ruido e impulsar
medidas de reducción de la contaminación acústica adaptadas a cada espacio.

Las Zonas Tensionadas Acústicamente en Horario Nocturno también deben permitir fomentar los ayudas a la rehabilitación entre el vecindario. Los vecinos y vecinas de las zonas tensionadas podrán acogerse a las ayudas para la rehabilitación del Ayuntamiento como hacen las vecinas de las Zonas Acústicas de Régimen Especial (ZARE), obteniendo ayudas a la inversión atendiendo a sus circunstancias concretas.

Barcelona impulsa nuevas medidas para reducir el ruido nocturno