Nueva normativa para impulsar edificios nuevos que reduzcan el consumo energético en Barcelona
La Comisión de Ecología, Urbanismo, Movilidad y Vivienda ha aprobado inicialmente la actualización de la normativa que regula las dimensiones de los patios interiores y los patios de luces para impulsar edificios más sostenibles en la ciudad. Se trata de una modificación del Plan general metropolitano de 1976 para favorecer la implementación de elementos arquitectónicos que reducen el consumo energético de los edificios, sobre todo en lo que se refiere a los espacios de ventilación y renovación del aire y la iluminación natural.
Su objetivo es fomentar la eficiencia energética y adaptar la norma a los estándares actuales. A partir de ahora sólo la superficie mínima exigida contará dentro del cómputo de edificabilidad del edificio y, por tanto, si un promotor decide hacer un patio o patio de luces mayor que el tamaño mínimo requerido, no le computará en la edificabilidad . Así, se quiere promover espacios más amplios que permitan una ventilación de mayor calidad y mejor iluminación con luz natural y por consecuencia mejorar la eficiencia energética de los edificios nuevos y las grandes rehabilitaciones.
Se añade un nuevo concepto de edificación destinado a la iluminación y ventilación natural de los edificios, el espacio interior libre de edificación. Este espacio, con dimensiones suficientes para asimilarse a un espacio exterior oa un interior de manzana, no consumirá edificabilidad, con lo que se incentiva la incorporación de mejores condiciones bioclimáticas a las viviendas.
La nueva normativa también regula la iluminación y ventilación naturales de las plantas subterráneas, que, cuando reciben esta iluminación y ventilación a través de espacios interiores libres de edificación, patios o patios de luces, la superficie construida se tendrá que incluir dentro de la edificabilidad, con la salvedad de que se destine a uso de parkings o trasteros.
Impulso de los atrios bioclimáticos
La actualización de la normativa también quiere ser una apuesta por la incorporación de patios bioclimáticos, espacios interiores que permiten mejorar la ventilación y la iluminación natural de las edificaciones aprovechando los fenómenos naturales para regular la temperatura y circulación del aire. La incorporación de los atrios bioclimáticos se permitirá tanto los proyectos de obra nueva como en la rehabilitación de edificios existentes con el objetivo de mejorar la eficiencia energética y la calidad ambiental del interior. En este caso el patio bioclimático no se considera edificabilidad, por tanto, fomenta su creación sin afecta al techo edificable del edificio.