Detenido un menor por tirar al suelo a una anciana y robarle dos cadenas de oro

Desarticulado un grupo que forzaba los expendedores de los cajeros tras provocar un error en el sistema

Agentes de los Mossos d’Esquadra detuvieron, la semana pasada, a dos hombres de 50 y 62 años y una mujer de 42 años a los que se les atribuye 15 estafas en oficinas bancarias por un valor de 11.410 euros, aunque lo intentaron 21 veces más.

A finales de enero los investigadores tuvieron conocimiento de estos hechos mediante la denuncia del representante adscrito al grupo antifraude de una entidad bancaria. Informaba que unas personas, utilizando dos tarjetas de crédito/débito, hacían extracciones en varios cajeros automáticos de Barcelona sin que estas operaciones quedaran anotadas en la cuenta corriente de las tarjetas de forma que provocaban un perjuicio económico a la entidad bancaria.

Las extracciones ilícitas empezaron el 18 de diciembre y se alargaron hasta el 9 de enero. Los autores introducían las tarjetas en el cajero, solicitaban un reintegro y, posteriormente, en el momento en que el cajero se disponía a sacar el dinero, cancelaban la operación y bloqueaban la salida de la tarjeta. Esto provocaba un error en el sistema y lo aprovechaban para forzar el cajón expendedor del dinero.

Este tipo de estafa se llama «Teller Hooking», donde la víctima no es el titular de la tarjeta bancaria sino la entidad bancaria. Los autores suelen utilizar terceras personas, que facilitan las tarjetas de crédito y el código personal para realizar la operativa fraudulenta. Las tarjetas son, por tanto, de curso legal, para no levantar ningún tipo de sospecha de la entidad bancaria, y los titulares suelen recibir un porcentaje de la cantidad conseguida.

Para que los titulares y coautor de la estafa tengan liquidado en la cuenta corriente asociada a la tarjeta bancaria utilizada, ingresan la cantidad de dinero con la que operarán a posteriori, y una vez finalizada la operación u operaciones fraudulentas, realizan una retirada de efectivo del dinero ingresado anteriormente. Muchas veces los autores llegan a multiplicar por cuatro el dinero ingresado inicialmente. 

Durante la investigación de este caso los investigadores tuvieron constancia de que en agosto sucedieron unos hechos similares en Madrid en los que estafaron 200.000 euros en varios cajeros automáticos. Se detuvieron a 10 personas, pero un hombre logró huir y se estableció en Barcelona para continuar su actividad delictiva. Gracias a las gestiones de investigación los mossos confirmaron que era la misma persona que estaba cometiendo las estafas en la capital catalana y le detuvieron.

Además, como las dos tarjetas de crédito utilizadas para cometer las extracciones de dinero nunca fueron denunciadas por parte de sus titulares como sustraídas ni por uso fraudulento, los investigadores determinaron que estas dos personas estaban colaborando con autor de las estafas. Los policías identificaron a un hombre y una mujer y los detuvieron.

Los arrestados, todos ellos con antecedentes policiales, pasaron este fin de semana a disposición judicial y quedaron al libertar con cargos.

Forzaban los expendedores de los cajeros tras provocar un error en el sistema