Nuevos radares en la Ronda Litoral para reforzar el control de velocidad en la Zona Franca
El Ayuntamiento de Barcelona ha puesto en funcionamiento desde este viernes dos nuevos radares de punto en la Ronda Litoral (B-10), situados en el kilómetro 16,1, a la altura de la Zona Franca, uno por cada sentido de circulación. Con esta actuación, el consistorio refuerza su compromiso con una movilidad más segura y con la reducción de accidentes en una de las vías más transitadas de la ciudad.
Ubicación seleccionada según datos de siniestralidad
La decisión de instalar estos dispositivos se ha tomado tras un análisis conjunto entre el Área de Movilidad y la Guardia Urbana, evaluando los puntos con mayor concentración de siniestros. Los nuevos radares se han colocado estratégicamente para corregir excesos de velocidad y mejorar la seguridad en un tramo donde se han detectado riesgos recurrentes.

Tecnología renovada para un control más eficaz
La puesta en marcha de estos dos puntos de control forma parte de las mejoras incluidas en el contrato de mantenimiento de radares del Ayuntamiento, que contempla la incorporación de tecnología más moderna y la renovación de equipos ya existentes, como el radar actualizado en la Ronda de Dalt (B-20).
Este avance tecnológico permite un seguimiento más preciso del cumplimiento de los límites de velocidad, ayudando a prevenir infracciones y contribuyendo a una mayor seguridad vial en la ciudad.



































