La tuneladora de la L8 entrará en funcionamiento en verano de 2026

La ampliación de la L8 despierta alivio y preocupación entre los vecinos de la Esquerra de l’Eixample

La Associació de Veïns i Veïnes de l’Esquerra de l’Eixample mantiene un seguimiento constante de las obras de ampliación de la Línea 8 del metro, que afectan a distintos puntos del barrio. Tras las últimas reuniones informativas, el balance entre el vecindario es desigual, con decisiones bien recibidas pero también con temores persistentes sobre la evolución del calendario.

Por una parte, existe satisfacción por las modificaciones en el recorrido de los camiones que retirarán las tierras excavadas. Sin embargo, preocupa que los plazos de ejecución se estén alargando y que las afectaciones previstas puedan prolongarse más de lo anunciado.

Activación de la tuneladora y gestión de las tierras

La tuneladora de la L8 comenzará a funcionar en el verano de 2026 desde el pozo de ataque situado en la Gran Via de les Corts Catalanes. La tierra extraída se transportará mediante una cinta subterránea hasta el Parque de Joan Miró, donde se acumulará en un gran espacio arenoso que los vecinos ya han apodado “la judía” por su forma característica.

Desde la asociación vecinal explican que la extracción será continua durante las 24 horas, ya que la tuneladora trabajará sin interrupción, aunque los camiones solo circularán en horario diurno. El material se irá acumulando progresivamente hasta su retirada.

Alivio por el recorrido de los camiones

Uno de los principales temores del vecindario era el impacto del tránsito de camiones, que podría haber afectado a centros escolares, una biblioteca y zonas residenciales próximas al parque. Finalmente, se ha decidido que los vehículos accedan y salgan por la calle de Tarragona, evitando así estos puntos sensibles.

Desde la entidad vecinal valoran positivamente esta decisión, ya que se evita el paso diario de decenas de camiones frente a escuelas, una reivindicación que habían planteado de forma reiterada.

Impacto en la movilidad y temor a nuevos retrasos

Con el inicio de la excavación, la calle de la Diputació quedará reservada principalmente a los servicios de obra, aunque se permitirá el paso de peatones y bicicletas. En la Gran Via también se prevén nuevas afectaciones al tráfico, y la calle de Vilamarí permanecerá cortada durante parte de los trabajos debido a la ampliación de la estructura de protección del pozo de la tuneladora.

Más allá de la movilidad, el vecindario expresa su inquietud por la posibilidad de que se acumulen más retrasos, recordando que en otros puntos del trazado, como Comte d’Urgell y Muntaner, las obras ya se han prolongado más de lo previsto. El inicio de la fase más intensa genera dudas sobre cómo evolucionará el calendario si ya se arrastra demora desde los trabajos previos.

Con el objetivo de resolver dudas y atender consultas, a partir de este lunes se abrirá un punto de atención ciudadana en el recinto de la Escuela Industrial, donde los vecinos podrán informarse sobre el desarrollo de las obras y sus afectaciones.