Crece el consumo de alcohol y el consumo de riesgo en Barcelona

Crece el consumo de alcohol y el consumo de riesgo en Barcelona

Según la última Encuesta de Salud de Barcelona 2021, el consumo de riesgo y el consumo compulsivo de alcohol ha aumentado de forma importante respecto a 2016, sobre todo entre los jóvenes. Se considera de riesgo el consumo de 17 unidades semanales o más en mujeres y 28 semanales o más en hombres, entendiendo que una copa de vino, una cerveza o un carajillo o chupito equivalen a una unidad y una copa o combinado con whisky o licor similar equivale a dos.

El consumo de 5 o más consumiciones seguidas más de una vez por mes se define como consumo compulsivo. Así, en 2021 el consumo de alcohol de riesgo es del 7,9% en las mujeres y del 14,1% en los hombres, mientras que en 2016 los porcentajes eran 4,2% y 9% respectivamente. En cuanto al consumo compulsivo, en 2021, es del 6,9% de las mujeres y del 13,2% de los hombres, mientras que en 2016 los porcentajes eran 3,3% y 8,3% respectivamente

Por otra parte, cabe recordar que el alcohol es la primera causa de inicios de tratamiento por trastorno de consumo de sustancias psicoactivas en los Centros de Atención y Seguimiento (CAS) en las drogodependencias de Barcelona y que su abuso comporta importantes consecuencias tanto para las personas consumidoras como para sus familias y amigos y para la sociedad.

Crece el consumo de alcohol y el consumo de riesgo en Barcelona

En Barcelona, ​​en 2021 se produjeron 1.117 inicios de tratamiento en mujeres y 3.066 inicios de tratamiento en hombres, el 54,9% de los inicios en las mujeres (613) y el 43,5% de los inicios en los hombres (1334 ) estuvieron motivados por el consumo de alcohol. En los últimos años, tanto el número de inicios como la edad de inicio de tratamiento, que en 2021 fue de 48 años tanto en mujeres como en hombres, se han mantenido estables.

Coincidiendo con la semana de la sensibilización de los riesgos del consumo del alcohol, la Agencia de Salud Pública de Barcelona (ASPB) hace públicos estos datos y recuerda que el alcohol es la sustancia más consumida, tanto entre los jóvenes como en la población adulta, y aunque es conocido que provoca problemas de salud y sociales de gran importancia, en nuestro entorno su consumo está muy aceptado ya menudo banalizado. Por eso, pone énfasis en la importancia de la prevención de los riesgos que conlleva su consumo.

El alcohol es uno de los principales factores de riesgo evitables de mortalidad y morbilidad en el mundo. Está asociado a un gran número de enfermedades (cáncer, digestivas, circulatorias…), así como a muertes tanto directas como indirectas, como por ejemplo las muertes por lesiones de tráfico.

Además, el abuso de alcohol se relaciona también con conductos de riesgo y situaciones de violencia. El consumo de riesgo es el límite para orientar la intervención precoz por parte de profesionales de la salud, sin embargo, hay que tener en cuenta que en el consumo de alcohol no hay un nivel seguro, por tanto, si se consume, cuanto menos mejor.

En este sentido, el abordaje de esta problemática es una prioridad para la salud pública y la ASPB lleva tiempo trabajando con intervenciones preventivas dirigidas a niños, jóvenes y población adulta, así como con acciones sobre el entorno. De hecho, ésta es una estrategia de ciudad que se recoge en el Plan sobre Drogas y Adicciones de Barcelona 2021-2024 y en los anteriores.

Entre las acciones recogidas en el último Plan destacan la actualización de los programas de prevención escolares, la continuidad de los programas preventivos en los barrios, así como de las acciones sobre el entorno para el cumplimiento de la normativa sobre el alcohol y para reducir el impacto del consumo de alcohol y otras drogas en la vía pública. Otro de los objetivos es implementar programas de reducción de daños para personas que consumen alcohol,

Por último, la ASPB quiere recordar que la ciudad dispone de una red de recursos públicos para la atención a las drogodependencias, accesibles a todos los vecinos y vecinas, donde pueden acceder a asesoramiento y ayuda profesional.

En concreto, hay 15 CAS en los diferentes distritos y el Servicio de Orientación sobre Drogas (SOD), que se dirige a los jóvenes de 14 a 21 años, sus familias y los profesionales que trabajan con ellos, del ámbito educativo u otros.