Barcelona realiza la primera compra de viviendas protegidas que marca la normativa del 30 %
La Comisión de Gobierno del Ayuntamiento de Barcelona ha aprobado su primera compra de viviendas sobre plano procedentes de la obligación de destinar un 30% de las nuevas promociones y grandes rehabilitaciones a Viviendas de Protección Oficial (VPO).
Esta primera adquisición, que se hace efectiva a través del derecho de compra preferente de la administración para adquirir viviendas protegidas a la venta en la ciudad, consistirá en la compra de ocho pisos de entre 71 y 89 metros útiles, ocho plazas de aparcamiento y un trastero. Los pisos se prevé que estén disponibles en 2024, cuando pasarán a formar parte del parque de alquiler público.
El edificio donde se ubican estas viviendas tiene un total de 27, está situado en el número 29-35 de la calle Puerto Príncipe, en el Distrito de Sant Andreu, en el barrio del Congrés i els Indians y está en proceso de gran rehabilitación. El coste total de la compra con aparcamientos y trastero es de 2.094.730 euros.
Estos pisos se ubican en un barrio en el que no hay ni vivienda pública, ni solares disponibles, lo que pone de manifiesto la importancia de esta norma, ya que permite diseminar vivienda pública y protegida en zonas especialmente necesitadas. Asimismo, en la medida en que el precio de los pisos de viviendas protegidas viene marcado por ley – 2.459€/m2 útil – es una vía más asequible que la compra a precios de mercado.
A estas alturas, gracias a la normativa barcelonesa se están construyendo pisos en los distritos del Eixample, Sants-Montjuïc, Gràcia, Horta-Guinardó, Nou Barris, Sant Andreu y Sant Martí. Ahora bien, la normativa preveía también un plan de seguimiento y control de su cumplimiento.
Tras los dos años de exenciones y la pandemia, también se han iniciado inspecciones para detectar posibles incumplimientos en la obligación de incorporar viviendas protegidas. La inspección ha permitido detectar 17 edificios que no cumplen con el 30% obligatorio de vivienda asequible y que se sancionarán de acuerdo con la Ley Catalana por el derecho a la Vivienda.
La compra de viviendas protegidas se enmarca en la voluntad municipal de ampliar el parque público a través de todos los mecanismos posibles. En total, desde 2015 el Ayuntamiento ha comprado 1.361 pisos diseminados por toda la ciudad con una inversión de 152,56 millones de euros, de los que 206 son protegidos. Por su parte, la Generalitat a cierre de 2021 había comprado 438 en total.
Asimismo, en el caso del 30% la compra sobre plano de vivienda protegida aporta liquidado a los promotores y garantiza viviendas nuevas a precios asequibles que pasan a formar parte del alquiler público. El Ayuntamiento ha confirmado su interés en comprar el resto de pisos protegidos procedentes del 30%.
Con esta compra de viviendas protegidas, el parque público y asequible de la ciudad supera las 11.500 viviendas, cifra que convierte a Barcelona en la ciudad española con más parque público en términos absolutos y en la segunda después de Bilbao en número de pisos públicos por habitante.
