Se inicia la reforma de la calle Cortit para mejorar su accesibilidad y ganar espacio peatonal
El Ayuntamiento de Barcelona, a través de BIMSA, iniciará esta semana las obras de la calle Cortit, en el distrito de Sant Andreu para mejorar su accesibilidad y ganar espacio para el uso de los peatones.
La actuación, largamente reivindicada por el vecindario de La Sagrera, consistirá en incorporar plataforma única para pacificar el tráfico rodado de la vía. La reforma se llevará a cabo entre la calle Portugal y la plaza Masadas, en el barrio de la Sagrera, y también incluye los espacios contiguos de las calles del Pacífico y Azores, así como un tramo de acera de la calle Portugal para poder resolver efectivamente las encuentros y cruces.
En concreto, el proyecto de reurbanización contempla la renovación completa de los pavimentos, la introducción de vegetación, la implantación de un sistema de riego, renovación del alumbrado, la renovación del desagüe de pluviales, el soterramiento de travesías aéreas y la previsión de un prisma de telecomunicaciones municipales.
Se ha optado por un diseño a partir de una plataforma única, por lo que el vehículo privado pierde la prioridad en su paso a lo largo del ámbito.
En la formalización de la calle Cortit se ha optado por la utilización de un único tipo de pavimento para reforzar esta prioridad del peatón. Los cambios en las dimensiones de las piezas se deben a criterios puramente técnicos.
