Arrancan las obras para transformar el edificio de la calle Londres 56 en el futuro Institut Escola Mallorca
Las actuaciones comienzan hoy y se prolongarán durante 21 meses, con la previsión de que los nuevos espacios educativos estén operativos en agosto de 2027 para iniciar el curso 2027-2028. El proyecto, que supone una inversión global de 5,7 millones de euros, se ejecutará por fases. En la primera etapa se realizarán los desmontajes interiores del edificio actual hasta febrero de 2026; posteriormente se avanzará con la construcción y adaptación de los nuevos espacios.
Inversión compartida y destino educativo
El Ayuntamiento ha cedido el inmueble, que cuenta con 3.173 metros cuadrados, y asumirá la mitad de la inversión, mientras que el otro 50% lo aportará el Departamento de Educación y Formación Profesional. El edificio se destinará a ampliar la Escola Mallorca, que pasará a convertirse en el nuevo Institut Escola Mallorca de dos líneas, ampliando la oferta pública de infantil, primaria y secundaria en el Eixample.
Inicio de los trabajos y planificación
La antigua construcción, vacía desde hace dos décadas por un largo proceso judicial, será completamente transformada. La primera fase abarca desmontajes interiores, retirada de elementos, falsos techos y materiales recuperables.
La segunda fase se centrará en la adecuación estructural, la nueva compartimentación, los acabados y la instalación del equipamiento necesario.
Durante la segunda etapa se mantendrá el tránsito de vehículos y bicicletas, con una organización específica del espacio público para permitir la actividad de la obra sin interrumpir la movilidad. Se creará un sistema de paso protegido para los peatones bajo un pórtico estructural.
Minimizar molestias y garantizar seguridad
El Ayuntamiento y el Departamento de Educación han previsto medidas específicas para reducir las afectaciones al vecindario y al centro educativo, concentrando los trabajos más ruidosos en periodos no lectivos y durante el verano. El edificio en obras quedará completamente sellado, evitando interferencias con el funcionamiento de la escuela actual.
Un edificio moderno y energéticamente eficiente
El nuevo espacio educativo tendrá aulas docentes, salas complementarias, zonas administrativas, biblioteca, talleres, laboratorios, aulas de música y espacios polivalentes. El diseño apuesta por galerías exteriores, iluminación natural y ventilación cruzada, creando zonas semiabiertas de gran confort ambiental.
Además, el edificio integrará sistemas de eficiencia energética y medidas pasivas de protección, optimizando el consumo y el bienestar interior.
Fin de una larga espera administrativa
La recuperación de este edificio pone punto final a un litigio que se extendió durante casi veinte años, permitiendo finalmente dar uso público y educativo a un inmueble municipal que había estado sin actividad.
El conjunto arquitectónico, diseñado por Jaime Coll y Judith Leclerc, fue Premio Ciutat de Barcelona 2006 en la categoría de arquitectura y urbanismo.





























