La verdad sobre el taxista que huía de la policía y chocó contra el camión de cervezas
Este jueves tuvo lugar un accidente en la intersección de las calles Balmes con la calle Mallorca cuando un vehículo pintado como un taxi era perseguido por la Guàrdia Urbana, después de haber cometido una infracción de tráfico.
El ‘taxi’ se saltó varios semáforos huyendo de la policía por la calle Balmes y al llegar a la calle Mallorca fue cuando se estrelló contra un camión de cervezas.
Debido al fuerte impacto el conductor del camión tuvo que ser rescatado por los bomberos, además, tanto el conductor del camión como su acompañante, así como el conductor del coche que provocó el accidente, fueron trasladados a los hospitales, aunque en estado leve.
Según varios titulares el taxista iba drogado y bebido, motivo por lo cual fue denunciado por un delito contra la seguridad del tráfico:
«Un taxi que fugia de la policia fa bolcar un camió al carrer de Balmes»
«Un taxista drogat que fugia de la policia fa bolcar un camió de cervesa a Barcelona»
«El taxista fugia de la Guàrdia Urbana després de cometre una infracció de trànsit»
«El conductor del taxi ha chocado contra el camión de Estrella Damm»
Pero, el coche que chocó contra el camión de cervezas no era un taxi. Según se puede apreciar en el vídeo, el vehículo pintado de negro y amarillo no tiene pintadas las calcas en las puertas, algo obligatorio para poder identificarlo como taxi y además, si nos fijamos en el techo del coche, tampoco lleva módulo de taxi, este que se ilumina en verde o con el número de tarifa cuando el taxi está con servicio.
Según el Instituto Metropolitano del Taxi (IMET), el que un coche pintado de amarillo y negro circule por las calles, no está prohibido por la normativa, y si es obligatorio que tenga pintado el número de licencia tanto en las puertas delanteras como en la parte trasera; y llevar visible el módulo taxi homologado en el techo del vehículo cuando ejerce como servicio público.
A veces podemos ver por la ciudad algún vehículo como este circulando y se puede tratar de taxis que su propietario a vendido y el comprador no lo ha pintado, pero definitivamente, no es un taxi, como ocurre en esta ocasión.
La verdad sobre el taxista que huía de la policía y chocó contra el camión de cervezas
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