Luz verde al Plan de Movilidad Urbana 2024

Luz verde al Plan de Movilidad Urbana 2024

La Comisión de Ecología, Urbanismo, Infraestructuras y Movilidad ha aprobado inicialmente el Plan de Movilidad Urbana 2024. Lo ha hecho con los votos a favor del Gobierno municipal (Barcelona en Común y PSC), la abstención de ERC y Cs y los votos en contra de JxCat, PP y Barcelona por el cambio.

A partir de ahora se abre un periodo de exposición pública durante el cual se podrán presentar las alegaciones correspondientes. Posteriormente, el PMU se deberá llevar a aprobación definitiva en el pleno del Consejo Municipal.

El documento que se ha llevado a votación se ha debatido con las asociaciones que integran el Pacto por la Movilidad y otras entidades de la ciudad.

El Plan de Movilidad Urbana 2024 se marca cuatro retos principales que pasan por ofrecer respuestas en el ámbito de las necesidades de movilidad de las personas y las mercancías: garantizar el derecho a la movilidad; velar por la salud y la seguridad de las personas; contribuir a la recuperación de la actividad económica y comercial; y combatir la crisis climática y mejorar la calidad del aire.

El plan actúa en cinco grandes ámbitos: movilidad segura, sostenible, saludable, equitativa y movilidad inteligente y propone llegar al siguiente reparto modal el 2024:

  • Desplazamientos a pie: pasar del 34,35% al ​​35,27% de cuota modal.
  • Desplazamientos en transporte público: pasar del 37,33% al 41,25% de cuota modal.
  • Desplazamientos en bicicleta: pasar del 2,28% al 5% de cuota modal.
  • Desplazamientos en vehículo privado: pasar del 26,04% cuota modal al 18,48%.

El PMU apuesta por incrementar la cuota de los desplazamientos en modos sostenibles: a pie (+ 7,5%), en transporte público (+ 15,7%) y en bicicleta (+ 129,4%), y reducir los que se hacen en vehículo privado (-25,6%).

Con este reparto modal, un 81,52% de los desplazamientos se harían a pie, en transporte público o en bicicleta, alcanzando la cifra más alta de etapas realizadas con medios sostenibles.

Para ello se concretan un total de 60 líneas de actuación, con más de 300 medidas específicas para llevar a cabo en los próximos años, que básicamente se centran en:

  • Favorecer los desplazamientos con modos sostenibles.
  • Reducir los desplazamientos ineficientes o contaminantes.
  • Regular y mejorar la eficiencia de la movilidad esencial.

El PMU pone como base de la movilidad al peatón y hace énfasis en medidas de transporte público, distribución urbana de mercancías y en la regulación del aparcamiento en superficie.

Entre las acciones destacan:

  • En el ámbito de los peatones: eliminar progresivamente aparcamientos de motos y carriles bici en aceras; aumentar con 32 km las calles para peatones; mejorar la vigilancia y control de la disciplina en las aceras; instalar ascensores y escaleras mecánicas accesibles en el espacio público; eliminar todos los obstáculos en los espacios destinados a peatones (palos, armarios, etc.); restringir y reducir la movilidad rodada en los entornos de los centros escolares, al menos en los horarios de entrada y salida.
  • En el ámbito del transporte público: mejorar la eficiencia de la red de bus, racionalizando los recursos en base a la demanda de cada línea y revisando trayectos; analizar la red de fin de semana para dar un mejor servicio al cliente en base a sus movimientos; incrementar 67 nuevos km de carril bus; elaborar una propuesta de ordenación de autobuses supramunicipales y de creación de estaciones de autobuses; impulsar Park & Ride con conexión al transporte público en origen; analizar la transformación de las líneas de bus de barrio en bus a demanda; completar líneas enteras con buses cero-emisiones; implantar el plan de mejora de la oferta de metro mejorando la frecuencia de paso; priorizar e impulsar actuaciones críticas del plan de cercanías; desarrollar una app pública del taxi; estudiar el sistema de microparadas de forma generalizada.
  • En el ámbito de la bicicleta y los vehículos de movilidad personal: incrementar la red actual de carriles bici en un 40%; incluir un carril <30 km / h en las calles de tres o más carriles de circulación, para fomentar la compatibilidad con la bici; estudiar la ampliación del número de bicicletas eléctricas del Bicing en función de la demanda; desarrollar el plan estratégico de aparcamiento seguro de bicicleta en la ciudad.
  • En el ámbito de la distribución urbana de mercancías (DUM): estudiar la modulación del tiempo de estacionamiento en el ÀreaDum en función del tipo de actividad de distribución que se realice; impulsar la implantación de microplataformas logísticas de distribución de última milla al menos una en cada distrito de la ciudad; promover la carga y descarga nocturna con vehículos silenciosos; potenciar el sistema de consignas o Click & Collect (alternativas para reducir las entregas a domicilio); estudiar y promover medidas tarifarias y / o fiscales para reducir el impacto ambiental de la DUM ( «tasa de última milla», «tasa e-commerce»); analizar la siniestralidad en el ámbito DUM y promover medidas para minimizarla.
  • En el ámbito del vehículo privado: intensificar las actuaciones sobre las zonas de concentración y puntos de riesgo de siniestros; implantar la velocidad de 30 km / ha toda la ciudad, excepto en las vías de conectividad, fomentar y priorizar el uso de vehículos más sostenibles y menos ruidosos, preferentemente eléctricos y alternativamente GLP o GNC; alcanzar un 80% de la flota municipal eléctrica en 2024; incrementar los puntos de recarga para vehículos eléctricos (60 puntos de recarga rápida); desarrollar e implementar la Estrategia de Aparcamiento de la ciudad; extender la regulación del AREA en toda la ciudad hasta alcanzar el 90% de las plazas reguladas en calzada; potenciar una red de aparcamientos con servicios a la movilidad más diversificados (bicicletas, motos, DUM, vehículo eléctrico y vehículo compartido).
  • En el ámbito de las nuevas tecnologías: extender los servicios de vehículos compartidos en el ámbito metropolitano. (turismos, motos y bicicletas), con la respectiva ampliación de licencias; implementar la incorporación de sistemas automáticos de control de la indisciplina vial (Ej: radar, radar pedagógico, radares de tramo, foto-rojo, cámaras, etc.); introducir la video-denuncia a los buses para identificar y multar a los vehículos que hagan infracciones en las paradas y en los carriles bus.

Dada la excepcionalidad que se está viviendo con la Covid-19, el Ayuntamiento de Barcelona hará una revisión dentro de un año de la situación de la movilidad en la ciudad para evaluar si es necesario ajustar las medidas.

Luz verde al Plan de Movilidad Urbana 2024