Impulso a las obras de remodelación de la Terminal 2 del aeropuerto
La pandemia ha permitido en los últimos meses acelerar las obras de remodelación ya previstas en la terminal T-2 del Aeropuerto José Tarradellas Barcelona-El Prat, que se mantiene inoperativa desde finales de 2020 después de que Aena concentrara toda la actividad a la T-1.
Los trabajos consisten en la renovación del sistema de transporte de los equipajes de las tablas de facturación hasta las bodegas del avión, de la climatización de la terminal, la instalación de más filtros de seguridad y la sustitución de 23 pasarelas para embarcar en los aviones, entre otros. Los trabajos permitirán equiparar los niveles de calidad de la terminal a los de la Terminal 1 y adaptarse a las normativas europeas.
En total, la compañía invertirá 106 millones de euros. La actuación más importante es la renovación del Sistema Automatizado de Tratamiento de Equipajes (SATE), con 80,8 millones de euros.
Está formado por dos kilómetros de cinta y puede inspeccionar hasta 6.000 maletas por hora, que son discriminadas en función de si se necesitan ser revisadas más a fondo o ya se pueden cargar en el avión. Desde hace unos años, el SATE ya está operativo en la en la T1 y en unos meses lo estará también en la T-2.
Los trabajos en el exterior de la terminal también han permitido recuperar medio millar de plazas de parking en un espacio ocupado hasta ahora por las obras de la estación de la futura línea de tren con destino a la T-1 y que transcurre por debajo de la pista principal del aeropuerto. En total, alrededor de la terminal hay 7.000 plazas en superficie y 6.700 en dos edificios cercanos.
A pesar de que la finalización de todos los trabajos está prevista para diciembre, la terminal puede reabrir en cuanto lo requiera la demanda. Por ello, no será necesario que se llene la T-1 del todo, sino que se habilitaría para garantizar que los pasajeros pueden mantener distancias de seguridad y no se produzcan aglomeraciones en una sola terminal. Prevén que una vez recupere la actividad, las compañías que estaban en la T-2, mayoritariamente ‘low cost’, también irán volviendo.
Impulso a las obras de remodelación de la Terminal 2 del aeropuerto
