Finaliza la restauración de la Fuente de Hércules, la más antigua de Barcelona

Finaliza la restauración de la Fuente de Hércules, la más antigua de Barcelona

La fuente ornamental más antigua de la ciudad luce como nueva. Se trata de la Fuente de Hércules, situada en el cruce del paseo de Sant Joan con la calle de Còrsega, en el distrito de Gràcia.

El Ayuntamiento, a través de la Dirección de Servicios de Arquitectura Urbana y Patrimonio, ha finalizado los trabajos de restauración del monumento, que han supuesto una inversión de unos 72.000 euros.

La fuente tiene una base circular que hace de estaño, y en medio se levanta un monumento formado por un pilar que sostiene la figura de pie de Hércules desnudo, apoyado sobre un garrote y con la piel del león Nemea el brazo izquierdo. A ambos lados de la base del pilar hay dos leones que sostienen una esfera con las patas delanteras y brotan agua por la boca.

También sale agua de una pequeña figura de delfín alado, y en el centro del conjunto se forma una cascada formada por cuatro balsas semicirculares que vierten agua una encima de la otra. A media altura del pilar hay, a cada lado, dos serpientes entrelazadas.

Además, el pedestal de Hércules tiene, mirando a mar, un medallón ovalado de mármol blanco con el retrato de Carlos IV y María Luisa en bajorrelieve, ya la banda montaña otro también de mármol blanco con el escudo de Barcelona.

El monumento está esculpido con piedra de Montjuïc. Este tipo de piedra es muy porosa, y con el tiempo había ido absorbiendo residuos de hierro del agua de la fuente.

Debido a esto, a toda la escalinata y en la boca de los leones se había incrustado una pátina de óxido que teñía la piedra de color marrón y modificaba el aspecto original de la escultura. Además, se había perdido todo el mortero de junta de los elementos que forman la escalinata, en algunas zonas habían salido manchas verdes y los medallones de mármol estaban bastante erosionados.

Las tareas han consistido en hacer una limpieza general de las superficies eliminando las manchas de óxido y las manchas verdes con materiales adecuados, y se han restaurado las superficies de piedra y de mármol.

Los escalones de la cascada de la fuente se han rejuntado con mortero de cal, y se ha hecho una nueva impermeabilización del vaso de agua con resinas y fibras de vidrio. Aparte, se ha cambiado la bomba de recirculación del agua y se han limpiado los tubos.

Más de dos siglos de historia y tres ubicaciones diferentes

La Fuente de Hércules fue diseñada por el escultor Salvador Gurri y esculpida por José Moret. Su primera ubicación fue en el antiguo paseo de la Explanada o paseo Nuevo, situado en el espacio que quedó entre la Ciudadela y la ciudad después de que el barrio de la Ribera fuera destruido en 1716.

El paseo se construyó a finales del siglo XVIII y estaba adornado con árboles y fuentes. La de Hércules se instaló en el extremo norte del paseo en 1802, hace más de dos siglos, con motivo de la visita del rey Carlos IV en Barcelona. De hecho, inicialmente se pusieron dos medallones en el pedestal de Hércules, que rezaban «Fruto de los pudientes naturales» el uno, y «La familia Real Hall delicia en este monumento de la beneficencia» y el otro.

El paseo de la Explanada desapareció hacia el 1881, al transformarse la Ciutadella en un parque público. La Fuente de Hércules fue trasladada junto al también desaparecido Palacio de Bellas Artes, situado donde hasta hace poco estaban los juzgados de primera instancia, de instrucción y penales, al final del paseo de Lluís Companys.

En 1928, dentro de las remodelaciones que se hicieron en la ciudad para la Exposición Internacional de 1929, fue trasladada a su ubicación actual, el cruce del paseo de Sant Joan con la calle de Córcega. Los medallones reales en honor de Carlos IV fueron suprimidos en tiempos de la Segunda República.

Finaliza la restauración de la Fuente de Hércules, la más antigua de Barcelona